Esta es tu receta. Para hacerla aún más ligera hemos preparado las pechugas de pollo al horno, y las hemos acompañado de tomatitos cherry también asados. ¡Simplemente deliciosas!
INGREDIENTES
- Para 2 personas
- 2 pechugas de pollo sin piel
- 2 cucharadas colmadas de queso crema
- 3 cucharadas de espinacas descongeladas y escurridas
- 1 cucharada de cebolla seca picada
- Un poco de nuez moscada
- Sal
- Pimienta
- 12 tomatitos cherry partidos a la mitad
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharada de vinagre balsámico de módena
Preparación
Pon a precalentar el horno a 180 grados. Descongela las espinacas en el microondas y en un tazón pequeño pon el queso crema con las espinacas troceadas, la cebolla picada seca, la nuez moscada, la sal y la pimienta. Mezcla todo de manera uniforme porque será el relleno de nuestras pechugas de pollo.
Con la ayuda de un cuchillo de sierra, haz un corte en el centro de cada una de las pechugas, salpimiéntalas y rellena cada lado del pollo con 1 o 2 cucharadas de la mezcla de espinacas y el queso crema.
Prepara una fuente para hornear, previamente engrasada con un poco de aceite de oliva. Pincela cada pechuga de pollo con el aceite de oliva, y espolvorea por encima un poco más de sal y de pimienta. Una vez las tengas, rocía con el vinagre balsámico de módena ambas pechugas.
Parte los tomatitos cherry a la mitad y ponlos en un tazón con un poco de aceite de oliva, sal y pimienta. Pon un poco de papel de aluminio sobre las pechugas y coloca por encima los tomatitos cherry.
Deja que todo se hornee unos 20 minutos a 180 grados, hasta que el pollo deje de estar rosado en la parte más gruesa.
Sirve las pechugas de pollo con un poco de tomatitos cherry por encima, y disfruta de todo el sabor.
¡La combinación perfecta!
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